“The Evolution of My Style: A Reflection of Time”

 

Have you ever looked at an old photo and thought, “Wow, I can’t believe I used to wear that!” or maybe “I miss dressing like that”? That’s exactly what happened to me this morning. While thinking about what to write for this week’s blog, I stumbled upon a picture that made me reflect on how much my style has changed over the last ten years.

 

The Power of a Photo

 

I never used to take pictures of my outfits, and selfies were something I rarely indulged in. But now, I do it more frequently, and I’ve realized how valuable it can be. Looking back at old photos doesn’t just bring back memories—it gives us a visual record of who we were at that moment in time.

 

Our clothing choices say a lot about us, even if we don’t consciously think about it. Seeing those pictures made me appreciate how style is an ever-evolving reflection of our identity.

 

Style is a Journey, Not a Destination

 

I’m someone who constantly declutters my closet. My wardrobe is always changing because, well, I’m always changing. What I loved wearing a few years ago might not feel like “me” anymore. When I go shopping, I notice how my tastes have shifted. Some pieces that would have caught my eye before no longer appeal to me. Instead, I find myself drawn to styles that align with the person I am today.

 

It’s fascinating to see how these small choices—what we keep, what we let go of, what we choose to wear—tell the story of our personal growth.

 

A Visual Timeline of Change

 

This realization inspired me to put together a little journey through time: photos of my style from 2015 to today, 2025. Looking at them side by side, I can see the phases I’ve gone through, the influences I’ve embraced, and the shifts in how I express myself.

 

Fashion isn’t just about trends—it’s about who we are in the moment. So, if you’ve never taken photos of your outfits before, maybe it’s time to start. You never know how much insight you’ll gain about yourself when you look back in a few years.

 

-MARIEL

 

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“La evolución de mi estilo: un reflejo del tiempo”

 

¿Alguna vez has mirado una foto antigua y pensado: “¡Wow, no puedo creer que usara eso!” o quizá “Extraño vestirme así”? Eso fue exactamente lo que me pasó esta mañana. Mientras pensaba en qué escribir para el blog de la semana, me encontré con una foto que me hizo reflexionar sobre cuánto ha cambiado mi estilo en los últimos diez años.

 

El poder de una foto

 

Antes, casi nunca tomaba fotos de mis atuendos, y los selfies eran algo poco común para mí. Pero ahora lo hago con más frecuencia y me he dado cuenta de lo valioso que puede ser este hábito. Ver fotos antiguas no solo trae recuerdos, sino que también nos da un registro visual de quiénes éramos en ese momento.

 

Nuestras elecciones de vestimenta dicen mucho sobre nosotros, incluso si no lo pensamos conscientemente. Ver esas imágenes me hizo apreciar cómo el estilo es un reflejo en constante evolución de nuestra identidad.

 

El estilo es un viaje, no un destino

 

Soy de esas personas que constantemente limpia su clóset. Mi guardarropa cambia porque, al final, yo también cambio. Lo que amaba usar hace unos años quizá ya no se siente como “yo”. Cuando voy de compras, noto cómo han cambiado mis gustos. Algunas prendas que antes me habrían encantado ahora ya no me llaman la atención. En cambio, ahora me atraen estilos completamente diferentes, alineados con la persona que soy hoy.

 

Es fascinante ver cómo estas pequeñas elecciones—lo que guardamos, lo que dejamos ir, lo que decidimos ponernos—cuentan la historia de nuestro crecimiento personal.

 

Una línea de tiempo visual del cambio

 

Esta reflexión me inspiró a recopilar un pequeño viaje a través del tiempo: fotos de mi estilo desde 2015 hasta hoy, 2025. Al verlas una al lado de la otra, puedo identificar las etapas por las que he pasado, las influencias que he adoptado y los cambios en la forma en que me expreso.

 

La moda no es solo cuestión de tendencias, sino de quiénes somos en cada momento. Así que, si nunca has tomado fotos de tus outfits, quizá sea una buena idea empezar. Nunca sabes cuánto podrás descubrir sobre ti mismo cuando veas atrás en unos años.

 

-Mariel